sábado, 30 de mayo de 2009

Notas de Lectura de "El mismo cuento distinto"

Conociéndonos por la lectura

Gabriel García Márquez descubrirá porqué nunca un relato es como lo recordamos. Sobre todo creo en el caso de los relatos de la infancia, de los cuales del recuerdo guardo más sensaciones que datos concretos. Quizás esto se debiera a las primeras incursiones en la literatura, de la cual sabría poco y nada; pero siempre ocurre, las historias no son como las recordamos, ¿A qué se debe? A que cambiamos. Nosotros, la sociedad, las expectativas, las razones, todo, absolutamente todo lo humano se altera, ya sea porque avancemos, retrocedamos, por las experiencias de la edad que la vida da.
Apasionado por la historia que conmoviera sus recuerdos, este escritor decidirá embarcarse a lo largo de casi medio siglo en la trama general del cuento de su devoción, interpretará a un Maigret menos experimentado y su perseguido será el cuento policial de Simenon. Sin ningún dato concreto conseguirá a lo largo de su vida, en diferentes lugares y gracias a diversas personas, las pistas que lo guiarán hasta otro gran escritor, Julio Cortázar, quien le develará el misterio. Debido a lo amateur de su papel detectivesco, todavía con nombre de autor y libro, deberá recorrer un trecho hasta dar con él, ya que al buscar la versión castellana tropezará con dicha historia nunca fue traducida del francés.
Los recuerdos no sólo eran difusos sino que algunos ni siquiera se reconocerían en el cuento, la percepción del relato de un perseguido donde él se sintiera más identificado y le angustiara el alma se transformaría en el relato de un perseguidor, el detective Maigret. Así como la resolución de la trama no sería de la simpleza que su mente en ese momento había podido crear y recordar.
Leer un cuento dos veces con el intervalo de un tiempo nos hará leer dos cuentos, leerlo tres veces, tres cuentos, pudiendo apreciar en cada lectura los detalles que en ése momento seamos capaces de percibir con la trama y los personajes que más se ajusten a nuestra mente y alma del momento. Leer un cuento dos veces nos hará conocernos más, cómo leemos y vemos al mundo. La apreciación y valoración que le daría Márquez a la relectura de “El hombre de la calle” de Simenon tendría esta significancia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario